Reseña del juego Battle Shapers

Los desarrolladores de Battle Shapers no negaron de dónde sacaron la inspiración, ya que su juego es similar a DOOM, enfrentándose a Mega Man, con Re.

Los desarrolladores de Battle Shapers no negaron de dónde sacaron la inspiración, ya que su juego es similar a DOOM, enfrentándose a Mega Man, con Returnal interviniendo al final del vuelo para volver a empezar.

Con un pedigrí así, no creo que sorprenda a nadie que Battle Shapers sea un juego de acción pura, con escaramuzas cargadas de adrenalina y muertes constantes. Esto se debe principalmente a los diversos elementos roguelite, que te permiten volver cada vez más fuerte tras cada intento de salvar la ciudad de New Elysium. Nuestra protagonista Ada también se verá obligada a evolucionar constantemente, ya que una infección iniciada por los líderes robóticos se ha infiltrado en todas las máquinas de la zona, convirtiéndolas en máquinas de matar descerebradas. El único de ellos que queda cuerdo es Mimo, a quien nuestra heroína intenta ayudar a combatir la locura y restaurar la paz perdida hace tiempo derrotando a los líderes robots.

Así pues, nuestra principal tarea será contener la infección derrotando a los líderes robóticos que la iniciaron. En el juego de acceso anticipado, se puede disparar a dos de estos robots, pero tendremos que pasar por una serie de secuaces antes de poder destruirlos. No es fácil al principio, ya que con cero mejoras y armas básicas no tendrás ninguna posibilidad contra ellos y tendrás que cultivar. Desgraciadamente, el juego no rehúye esta cuestión y empuja descaradamente la curva de dificultad hasta tal punto que te encontrarás en un montón de situaciones desesperadas en las primeras horas. Esto se nota especialmente cuando llegas a los jefes, donde incluso derrotar a los enemigos que aparecen en las dos primeras fases se convierte en una empresa entretenida, por no hablar de qué cabrón se convierte en la presa principal.

Debido a estas anomalías en la dificultad, por supuesto tenemos que mejorar, algo que podemos hacer entre intento y intento en el cuartel general. Aquí es donde puedes gastar el turinio ganado durante la partida, que puede usarse para comprar complementos permanentes. Esto te permitirá conseguir mejor armadura y más vida, así como reforzar las habilidades que hayas adquirido en los recorridos, haciéndolas más efectivas. Estas últimas, salvo algunas excepciones (esquivar, correr por las paredes), te las regalan. aleatoriamente dentro de las pruebas dadas, y depende de si la granada explota o deja un charco de fuego. Por supuesto, el juego puede ser poco amable contigo y dar una combinación de extras que hará que tu placa metálica explote al instante, pero conviene recordar que se pueden cambiar sobre la marcha si encuentras algo más útil.